Gedankenexperiment...

Albert Einstein llamaba así a sus "experimentos mentales", traducción literal de aquel neologismo germánico por él creado, el cual daba cuenta de estructuras lógicas presididas por un críptico "Supongamos que...". Evidentemente se trata de una estructura abierta, pero...

Supongamos que contamos con un aparato capaz de enviar una sola pieza de información a un momento preciso del tiempo. Un aparato de algún modo similar en su funcionamiento a una estructura hipertextual, es decir, un diseño de red abierta como lo es internet, pero con la capacidad de retroceder en el tiempo. De hecho esto es lo que ocurre en internet, aunque esta red abierta, paradógicamente, cumple inexorablemente con el Principio de Autoconsistencia de Novikov - así llamado en honor al Dr. Igor Dmitriyevich Novikov, profesor de astrofísica de la Universidad de Copenhague -, esto es, que aunque seamos capaces de enviar una sola pieza de información, que bien podría ser un observador activo como yo - en mi condición de Secretario de Actividades Subconscientes del Sindicato Argentino de Viajeros en el Tiempo -, esta pieza de información sería introducida de modo tal que el citado viaje en el tiempo mantenga el "estado" de los eventos de modo tal que conserven su coherencia, esto es: "inmutables", y que cualquier intento por violar el Principio de Autoconsistencia provoque un inesperado fallo del sistema.
Veamos un ejemplo: Muy a pesar de nuestras más arraigadas fantasías edípicas, por Principio de Autoconsistencia, si fuésemos capaces de viajar en el tiempo en nuestro actual estado adulto al preciso momento en que fuimos concebidos no podríamos ser sujetos del acto venéreo que nos dió origen, reemplazando a nuestro padre. Sólo podríamos ser objeto de la misma, o mejor dicho, consecuencia de aquel momento en que el más fuerte y veloz de los espermatozoides de nuestro padre se unió con el fértil óvulo de nuestra madre. De lo contrario, nuestro padre no sería quien fué y nosotros seríamos un otro distinto, producto de una nueva combinación de cromosomas que engendraría un hijo, en el mejor de los casos, similar a nosotros pero nunca nosotros mismos, que de hecho jamás hubiésemos sido, dado que no se habría dado la combinación espermatozoide - óvulo que nos dió origen... y sin un origen cierto, difícilmente hubiésemos podido seducir a nuestro edípico objeto de deseo. Estamos ante una paradoja.
Volvamos entonces a nuestra estructura de red aparentemente abierta y supongamos que enviamos un puntero temporal al Domingo 19 de Octubre de 2008 a las 22:00 hs., momento en que publicaba mi séptimo artículo en la Revista del Domingo de Cámara Gessell, cuyo título era el siguiente:

Ahora bien, supongamos que como observador activo y habitual viajero en el tiempo descubro que por fatal encuentro de dos cuerdas cósmicas los hechos del pasado - la crisis del campo de Marzo de 2008 en Argentina - que originaron la cadena de sucesos que confluyeron en los acontecimientos relatados en aquella crónica de la realidad del año 3.333 en la República Surrealista de Argentongo han sido modificados por una muy diferente resolución de aquel conflicto. Nuestra red se confirma evidentemente abierta y la paradoja se nos presenta como un hecho posible.
¿Qué debo hacer?. ¿Debo modificar el pasado para que se cumpla el Principio de Autoconsistencia de Novikov?.
Supongamos que lo hago y que envío una única pieza de información al domingo 19 de Octubre de 2008. ¿Qué creen ustedes que ocurriría?.
Es de esperar que la noche del 19 de Octubre a las 22:05 ya esté publicado aquel post. Comprobémoslo...
¿Qué ocurrió?. Como han podido comprobar, aparentemente no publiqué nada aquella noche.
Sin embargo el post está presente si seguimos el link a la sección de noticias políticas de la Revista del Domingo de Cámara Gessell. Estamos ante una nueva paradoja.
¿Acaso hemos comprobado la existencia de universos paralelos?. Evidentemente no estamos ante un Universo de Gödel, pero ¿puede darse el caso de encontrarnos en lo que el teórico de estructuras especiales John Richard Gott ha dado en llamar Universo Inflacionario, un tipo de universo que generaría brotes de nuevos universos; una de cuyas ramas se ha curvado hacia atrás en un bucle volviendo a su propio origen?.
Más, en todo caso: ¿cuál ha sido el origen de aquella paradoja?.
El seguimiento de las pistas de aquellos acontecimientos nodales ocupará las mentes de la Comunidad Gesselliana a lo largo de la Temporada 2009 de Cámara Gessell.

Sean bienvenidos a sumarse a esta nueva aventura del conocimiento.